jueves, 5 de septiembre de 2019

Vestirnos de boda

Esto no es un blog de moda ni yo voy a la última...pero muchas me habéis preguntado por la ropa de María, de Álvaro o por mi vestido para la boda de mi cuñada, así que a pesar de que a muchas ya les he respondido, lo dejo por aquí para quien le pueda ayudar, dar ideas o lo que necesitéis.

Teníamos poco tiempo, que la verdad para mí no es problema nunca porque como dice una amiga, "trabajo mejor bajo presión" pero lo malo era la época,...en plenas rebajas quedan pocas tallas de lo que quieres por lo que teníamos que decidirnos rápido por todo...aún así hay cosas que nos ha sido difícil encontrar.


María iba de arras con su prima, por lo que las dos niñas había que vestirlas iguales, después de barajar varias opciones, optamos por un vestido con sobre delantal de lino beige y tostado de Neck and Neck, visto por internet y reservado por una amiga...jajjaja...nosotras somos así,...ejejej…¡nos gusta el riesgo! Para los pies queríamos algo en clarito y como cada una vivimos en una ciudad, optamos por comprar a cada niña la mercedita que quisiéramos pero que pegase con el vestido. Yo opté por Pisamonas donde tenían bastante variedad de los tonos que quería, al final me decanté por una mercedita de lino con lazo en crudo. Como complementos, a mi me encantaban las coronas de flores de paniculata, me parece muy de boda y de una gran sencillez pero elegancia máxima; no recarga pero decora mucho. Las diademas nos las hizo Teresa y Ana de Viveros la Estación, en Antequera y quedaron preciosas .


Para los niños, mi primera opción fue pensar en la típica camisa mao con una bermuda camel, pero tengo un niño bastante presumido y quería ir a la boda de su tía con corbata y chaqueta, así que cambiamos radicalmente de outfit y optamos por una camisa azul clarito, americana en marino y bermuda camel, calcetín alto en marino y castellanos burdeos. Es una apuesta clásica que no pasa de moda... 

A última hora tuvimos problema de chaqueta para Javier y lo dejamos tal cual, sin chaqueta..y el pobre agradeciéndolo porque los graditos en pleno agosto que le esperaban no era para menos...ejejeje. La ropa de ellos era de diferentes sitios porque nos fue imposible cogerlo todo en una tienda por tema de tallas y rebajas...agotados en todos lados!!!
Javier llevó Camisa Tizzas, pantalón Bass 10 (ambas de El Corte Inglés), calcetines Cóndor y zapatos de Pisamonas. Álvaro (mi muñequito de primera Comunión..jejeje) llevó camisa y bermuda de Tizzas, americana de Gocco, calcetines de Cóndor y zapatos Pisamonas. Las corbatas de ambos son de Rojas de Antequera.

Para mí, yo misma me sorprendí. Soy la típica persona que me compro algo para un evento el día de antes...y a pesar de que mis amigas pensaba que si la boda era el 10 de agosto yo empezaría el mes de agosto sin vestido... las sorprendí comprándomelo la semana de después de poner los novios  la fecha... dicho y comprado...ejejej…. eso sí, no di muchas vueltas, no sirvo para ir a ver una y otra tienda.

Así que fui a una tienda de donde vivo, en Antequera, que me recomendó una amiga, por la que suelo pasar por delante una media de 6 veces al día y jamás había entrado. Eché un vistazo rápido a la tienda y me probé 3 vestidos. De esos tres, me quedé con el que más me gustó, más cómoda iba a estar y más se ajustaba a lo que quería: largo, que no tuviera escotazo y que no tuviera que taparme con nada para entrar a la Misa, ( no quería tirantes, ni espalda al aire,...) así que este vestido con escote medianamente alto, manga y no estrecho era justo lo que necesitaba...ejejej. Lo que más me gusta del vestido verdaderamente es la manga que tiene. Listo, en 10 minutos lo aparté, iba sola, sin móvil y sin posibilidad de que alguien más que la mujer de la tienda me diera una segunda opinión. Así que al día siguiente fui, me lo probé otra vez, me hice las pertinentes fotos para enviar a amigas de confianza y hermanas/o y alá... a comprarlo. 
 
Para los zapatos no fui tan rápida...el día de la boda tenía dos zapatos comprados. Unos zapatos joya de Lodi hiperbonitos fucsia y unas sandalias fucsia de Corina comprados en Titos, una zapatería de Antequera. Al final opté por la sandalia porque al tener tanto brillo el vestido me daba la sensación que con el zapato iba a ir recargada. De bolso utilicé un bolso lata que me prestó una amiga y como complementos me puse unos pendientes de mi madre, la pulsera que me regalaron mis padres para mi boda y un anillo especial que estrené ese mismo día.


Del maridín poco puedo poner, clásico 100%...todo de  Nartleb, una tienda de Antequera donde le tiene él cogido la talla y zapatos castellanos.



Y en otra ocasión, os contaré y enseñaré más cositas de la boda que os pueda interesar


domingo, 1 de septiembre de 2019

Final de agosto

Agosto, me dejas muy buenos momentos↴↴


Trasnochar y no escuchar el despertador por las mañanas. Momentos en familia que voy atesorando y de los que debemos disfrutar al máximo, ratitos con amigos y amigas de toda la vida, de los que nos hemos visto crecer y que siendo cinco o seis ya somos el triple haciendo de nuestros maridos e hijos que ellos también sean de siempre y sin importar los kilómetros que nos distancien a cada una. Noches de cenas y tapas, de helados y copas. 


Hemos tenido largas tardes de  piscina y bonitos atardeceres en la playa; costa e interior. Hemos tenido toboganes de parque acuático con las risas, miedos y diversiones de los niños,  ferias, cacharritos, casetas, verbenas con orquestas y churros con chocolate a las 5 de la mañana....algunos hasta amaneceres en barco en las aguas del mediterráneo...



Me dejas tan buenos momentos, ratos que guardaremos en la retina y en nuestro corazón, redescubriendo personas y valorando más incluso lo que tenemos, echando de menos a los que ya no están con nosotros y disfrutando sin ellos como si estuvieran. Me has traido tanto, que me has traído incluso un cuñado ejejje... Ha sido un mes movidito, intenso, festivo, alegre e ilusionante. 


Desde siempre se que eres mi mes favorito...y a pesar de tus 31 días siempre se me hace el más corto... 
Despido el mes como lo empecé, rodeado de buena gente y disfrutando, brindando por la vida, porque a pesar de todo, es bella y hay que disfrutarla.
Buen comienzo de septiembre a todos... Mes de propósitos y buenas intenciones, mes de borrón y cuenta nueva, mes de comienzos!!!

jueves, 29 de agosto de 2019

Castillo de Guardias Viejas

A escasos 6 kilométros de Almerimar, dónde hemos pasado unos días de vacaciones, vemos en el horizonte un castillo. Curiosamente llevo viniendo a este lugar alrededor de 23 años y nunca me había acercado a visitarlo. Este año, para que todo no fuera playa y "vagueo" les dijimos a los niños que una tarde-noche la ibamos a dedicar a visitar el castillo de Guardias Viejas que veíamos desde la playa.
Nos metimos en la web de turismo de El Ejido e investigamos el horario y curiosidades. Así vimos que queríamos ver atardecer allí y visitar las instalaciones alrededor de esa hora...Vimos que a las 20,50 h empezaba el sol a perderse por allí, así que llegamos un rato antes para corretear la zona....corretear o volar, porque casi volamos literalmente.

Había leído la cantidad de actividades que el Ayuntamiento hace en el Patio de Armas de allí aprovechando el entorno  (cine de verano, conciertos flamencos, baile, canta autores, recitales,...) y me sorprendió in situ ver la cantidad de gente que había acudido para el concierto de flamenco que había aquella noche.
Mientras el personal colocaba todo para el concierto, nosotros pudimos visitar la fortificación. La vimos por nuestra cuenta: sala de uniformes militares, sala de armas portátiles, sala de maquetas de fortalezas costeras y en lo que fue la capilla una sala de exposiciones itinerantes con un Arcángel San Miguel presidiendo el lugar.
La terraza de Artillería tiene unas vistas excepcionales, desde donde además de "volar", pudimos disfrutar de un atardecer precioso con el mar de fondo.

Mientras tanto, visitantes como nosotros entraban y salían sin parar, nunca hubiera imaginado que el Castillo de Guardias Viejas tuviera tantas visitas. Ya que nos íbamos se nos ocurrió preguntar por un Bunker que en el plano que nos dieron aparecía y un técnico muy amable nos invitó a acompañarle y nos organizó en unos minutos una excursión de lo más original desde el castillo hacia uno de los bunker que durante la Guerra Civil construyó el Frente Popular.
 El bunker al que fuimos (hay varios) está construido en las laderas del Castillo de Guardias Viejas debido a su situación estratégica con la costa. El bunker se encuentra tal cual lo construyeron. Allí Ramón, el técnico del Castillo, nos contó que hacían allí los milicianos y cómo pasaban los días mientras los buques Canarias, Baleares y el de los alemanes pasaban cerca de la costa a escasos metros.
La visita al Castillo nos pareció bastante interesante en general. Se encuentra bien conservado y está Declarado Bien de Interés Cultural.


Tras la visita, nos acercamos a un pueblito llamado Balerma a escasos kilómetros de Guardias Viejas, donde el pescado en todas sus formas es el ingrediente estrella en cada uno de sus bares.

domingo, 25 de agosto de 2019

Día en AquaVera

Un parque acuático es uno de los mayores atractivos para los niños. Los míos llevan varios años pidiéndonos que los llevemos y este verano, aunque no lo teníamos pensado, ha surgido ir a Aquavera por temas de logística familiar.
La última vez que fui a un parque acuático creo que fue hace 4 años y de despedida de soltera de mi amiga Gemma, no te digo más... nada que ver con la pandi que nos hemos plantado en Vera... 4 adultos y 5 niños.

La web del parque está bastante bien y te informa de los precios, horarios, servcios que ofrece,... Pecamos de "pardos" porque no llevamos la típica nevera ni íbamos preparados de comida, pero al llegar allí y ver el amplio espacio con merenderos y sombras y la cantidad de gente que había con comida, improvisamos comida de bocata de lo más rápido (justo en frete del parque acuático hay un supermercado que tiene de todo: vasos, servilletas, hielos, pan, embutidos,...) vamos, que montamos el picnic en un plis.
El parque en sí, está bien, es pequeño y accesible y a pesar de que había muchísima muchísima gente, no daba sensación de agobio ni había grandes colas, tan solo en dos ocasiones hicimos cola larga, por lo demás se hacía bastante llevadero.
Al entrar te hacen foto de grupo, de familia o con quien vayas y luego a la salida las cuelgan para que las compres si quieres.
Te dan la opción de guardar ropa en un guarda ropas, alquilar una "caja fuerte" y alguilar roscos para los toboganes de 1, 2 o 3 agujeros ( nosotros no los alquilamos, así que esperábamos pacientemente que nos dieran un rosco y luego hacíamos la cola correspondiente...ejejej.
La zona de los más pequeños está genial...María se lo pasó bomba tirándose por los tres toboganes que había. Al lado estaba la piscina de olas que también se metió con los mayores. Además había otra piscina-lago más.
Luego, en las alturas os podeis imaginar...todo tipo de toboganes para mayores y niños que midieran más de 1,20m.

Para comer había servicio de comida rápida de pizzas, hamburguesas y perritos a unos precios que rondaban los 8-10 € con patatas y bebidas y dentro del restaurante había buffet de un primero y un segundo con bebida y postre por 14€. Además, por el parque había quioscos repartidos por las distintas zonas con típicos gofres, buñuelos y helados.
Como anteriormente he comentado, la mayoría de las personas que había allí llevaban su comida y comían o bien en la zona de las tumbonas o en los merenderos, que la verdad la zona estaba fenomenal con muchas sombras y muchas mesas para comer...por ponerle un pero sería la falta de cubos de basura por allí.

Me sorprendió que los servicios-aseos en este tipo de sitios no suelen estar muy limpios, y la verdad es que estaban limpios y cuidados. Además en los aseos de la zona de salida hay duchas así que aprovechamos vinimos limpitos.
Cómo muchas me habeis preguntado por los precios,... he mirado por comparar con los precios de parques acuaticos que hay más cerca de mi zona y son más o menos similar. La verdad es que pasar un día en un parque acuático es un desembolso importante para una familiar normal. Es cierto que al menos AquaVera tenía descuento por familia numerosa, pero al final nos salía más barato si hacíamos combos de adultos más niño... así de triste. Y además los niños, a pesar de que el mayor tiene 10 años tenía que pagar como adulto por la altura, no lo entiendo...total; una ruina..jeejeje, al menos lo disfrutaron-disfrutamos bastante.
En fin, un plan en familia buenisimo donde los niños se lo han pasado en grande con sus primos y no han salido del agua practicamente nada.