miércoles, 23 de septiembre de 2020

Primera Comunión de Álvaro

Cómo ya os conté en el post anterior, lo que hice fue dividir todo en tres partes. El tema Iglesia era novedad, pues en la Primera Comunión de Javier, al ser en el cole, se encargaron de todo (Misa, flores, fotos, organización,...). 

Cómo los niños llevaban todo el verano en Arjonilla pensamos que sería buena idea organizarla allí, en la Iglesia del pueblo donde Javi y yo nos casamos. El sacerdote de la Primera Comunión ha sido nuestro párroco de Antequera, con el que tenemos muy buena relación y con quien los niños hacen de monaguillos normalmente. 

Cómo teníamos poco tiempo, fue un poco locura, porque los recordatorios los encargué "deprisa y corriendo" dos días antes de que nos dieran el ok la parroquia de Arjonilla. Nos arriesgamos porque literalmente no había tiempo... todo así...muy " a la bulla".. muy en nuestra línea...jejeje. Una vez que nos dijeron que "si" en la parroquia, nos liamos realmente a organizar: tema restaurante, detalles invitados, fotos de la Misa, buscar alojamiento para los invitados que venían de Antequera, probar traje de Primera Comunión, buscar zapatos,... Como era agosto y Jaén... decidimos hacerla por la noche por tema calor. 

Por cierto, a pesar de que hay ventiladores en la parroquia, se nos ocurrió entregar a los invitados en la Misa unos pay pay para que fuera más ligero el calor...o los niños jugaran en Misa😅 




Por la mañana nos dio tiempo a ultimar detalles en el restaurante, dejar las ofrendas puestas en la Iglesia, confesión (importante antes de comulgar), peluquería e ir recibiendo a los invitados que venían de fuera. 

Por la tarde llegaron los nervios. La verdad es que no me imaginaba a Alvarito nervioso. Estaba nervioso e ilusionado. El lugar era muy diferente al que hubiéramos tenido y hacerla sólo, sin sus compañeros también le imponía, pero organizamos una Misa muy participativa donde casi todos los niños que vinieron participaron (leyeron, llevaron ofrendas,...) y se sintió muy arropado en todo momento. 


Para la Misa hicimos unos libretos para que los invitados pudieran seguir la Misa con más facilidad. La portada es la imagen del recordatorio, dibujado por Nely a mano, os lo enseñaré con detalle más adelante. 

La organizamos con lecturas y el Evangelio que nos gustaba para la ocasión. La monición de entrada la escribió y leyó el abuelo y la monición final la escribimos Alvarito y yo y la leyó él. Las peticiones y las ofrendas las fuimos confeccionando pensando un poco en lo que iba a ser el momento...y a más de uno le sorprendió ver en la mesa de las ofrendas junto al Rosario o el Catecismo, un balón de fútbol....jejejej.... nosotros somos así, llevamos a Dios a lo más cotidiano. 

La homilía y todas las palabras de don Antonio fueron preciosas, muchos recuerdos en torno a las raíces, los abuelos y la familia, en especial a mi padre, quien desgraciadamente no hemos podido disfrutar con él ni un sólo momento de mis hijos. Una Misa hecha con mucho cariño, donde este maldito virus le ha dado el privilegio de recibir la Primera Comunión delante del Patrón del pueblo (inusual total que se encuentre en esa fecha en el altar mayor). 




Cómo buena Primera Comunión, no podía faltar la música, las canciones de Misa de toda la vida, las canciones que se cantan en las Misas de colegio o en las Misas de niños. Y ahí contamos con las voces del Coro de la Parroquia, sin Fina y las demás acompañantes, no hubiera sido posible.
Del tema flores tampoco me puedo olvidar. No quería nada recargado, sólo unos pequeños detalles en el altar y en el Sagrario. Y ahí conté con Puri, que también me hizo mi ramo de novia y decoró la Iglesia para mi boda. 

 En mi cabeza no estaba el tema fotos, vamos, ni se me había pasado porque ni yo le iba a hacer fotos de estudio, ni precomunión ni postcomunión, no eché cuentas. Pero me saltó la chispa al pensar que no iba a tener los recuerdos de la Misa como los tuve de la Primera Comunión de Javier así que me puse a preguntar y fortuitamente, uno de los domingo que fuí a Misa en el pueblo, ví a una chica haciendo fotos en un bautizo (luego me enteré que eran familia y por eso hacía las fotos). Total...que al preguntarle, se lo pensó y me dijo que si. Confié en Mari Paz para el tema fotos y estoy supercontenta porque era lo que quería, naturalidad y momentos bonitos tanto de la Misa como de la familia e invitados. 


Y como yo digo, las cosas son fáciles si te rodeas de las personas adecuadas. Preparar "un evento" (no me gusta llamar así a una Primera Comunión, pero al fin y al cabo de convierte en un evento en toda regla) requiere organización y tiempo. Si no tienes tiempo, sólo queda organización y rodearte de gente que te lo haga fácil y te ayude. 

Desde aquí agradecer por su puesto a Don Antonio por decirme Sí a lo loco, en los tiempos que corren, de virus, de confinamientos, por ir a 200km a celebrar la Comunión de su Alvarito, por no poner ni una pega, por no saber ni la hora de ida hasta el último momento y por adaptarse a todo en todo momento. A Fina, por poner música en la Primera Comunión, decirme un no pero si y un sí a tiempo (tú y yo ya nos entendemos)... A Fernando, por estar dispuesto a ayudar en el altar sin tan siquiera conocerme, a Nati, la sacristana, por traerte de cabeza hasta el último día, a Puri, por que despreocuparme contigo es saber que lo vas a hacer genial, a Mari Paz, por acompañarnos y captar todos los momentos y enseñarme el valor del aprendizaje es un camino seguro, a los amigos y familiares que nos acompañaron y por supuesto a mi hermanos que han sido mis manos y mis pies sobre todo en los últimos días cuando tenía cien cosas que hacer y sólo un cuerpo.



miércoles, 16 de septiembre de 2020

Preparativos Express Primera Comunión de Álvaro

 Dos semanas y media... exactamente en ese tiempo hemos preparado todo. Os voy a contar para quien pueda ayudar a preparar la Primera Comunión de sus hijos o sobrinos, qué he tenido en cuenta para organizarla. 



Cómo tenía poco tiempo focalicé y dividí los preparativos en tres apartados en una libreta (jejej): Iglesia, celebración y traje de Comunión y dentro de cada apartado anoté cosas que correspondían a ese apartado. Así iba "borrando" lo que tenía hecho o añadiendo citas a lo que faltaba por hacer.

Dentro de Iglesia metí temas burocráticos con el sacerdote que iba a oficiar la Misa y con la parroquia donde iba a ser (si es en la misma parroquia del sacerdote se te simplifica este paso...ejejje), organización de la Misa (elegir lecturas, ofrendas, peticiones,.., hacer el libreto, encargar flores, en mi caso, como hacía calor también encargué unos abanicos pay-pay de colores para los invitados, buscar tema música o coro para la Misa,...), confesión y pensar en alguien que dejara el día para el recuerdo plasmado en fotos. 


En el apartado de celebración metí preguntar en el Restaurante que queríamos, una vez confirmado ver temas menús y demás asuntos relacionados con la cena, pensar mesa de chuches, ver temática que le íbamos a dar a la "fiesta" para decorar y encargar todo el tema de papelería con esos motivos. También pensé en algunos detalles para los invitados y los recordatorios.

Burladero Comunión

En temas ropas, lo primero fue ir a comprar el traje de Primera Comunión, que lo teníamos visto en febrero. Tenía opción de cambiarlo por otro modelo pero Álvaro quería el que había elegido desde el principio. La suerte,...que no estaba arreglado (porque en febrero había que meterle) y que en agosto le quedaba perfecto..ejejej. 

Y así lo hice todo, aunque pese a llevar todo apuntado en una lista, se me quedaron cosas "en el tintero" o que he caído después. Ya no importa, lo importante, realmente está hecho.

Para no ser un post muy largo, os lo voy a ir desgranando en los post siguientes.


*Fotos de Mari Paz García

jueves, 10 de septiembre de 2020

Vuelta a las aulas en tiempos de Covid

 De todo se escucha en torno a la vuelta a las aulas de los niños este curso. Conversaciones con distintas posturas, "expertos" en las distintas comunidades que ni ellos se ponen de acuerdo...¿y los padres que hacemos? Reconozco que he escuchado y leído multitud de opiniones. Yo os voy a dar la mía propia, ni mejor ni peor que otra, además hasta donde mi conocimiento alcanza, no soy médico ni epidemióloga ni del club de expertos del gobierno (aunque viendo la formación de éstos podría serlo perfectamente 😒).

A mi lo que es realmente la vuelta al cole no me preocupa, sé que los colegios lo tienen bien organizado (al menos el mío) y que con todas las medidas adoptadas los niños van a estar con “pocos” riesgos. Que se pueden poner malos....¡pues claro, como en otro sitio! Reconozco que desde que nos dieron el pistolezado de salida después del confinamiento, en mi familia hemos hecho vida de lo más normal: hemos comido fuera, vamos de compras, damos paseos, viajamos, vamos a piscina, hasta mis hijos han estado todo el verano en escuela de verano y el mayor de campamento....¡y seguimos vivos!  A ver, que especifico no os vayáis a asustar,...no vamos por ahí " a porta gayola"..jejeje.... vamos con nuestras mascarillas, guardando distancias siempre que se puede, nuestro gel hidroalcohólico, etc....vamos, normalidad, o nueva normalidad, como queramos llamarlo.

Es cierto, que la vuelta no va a ser como siempre, los niños no van a tener las libertades de movimiento de siempre y todo va a ser "como raro", pero me resulta llamativo la cantidad de padres que piden que se haga vía telemática cuando han estado los tres meses de curso quejándose de ello. Yo quiero que  mis niños jueguen con sus amigos, les enseñe una maestra/o al que ven, preguntan dudas cuando las tienen, les sonríen o les cuentan sus "problemas". Quiero un cole presencial en el que mis niños estén con otros y no metidos entre cuatro paredes viéndonos las caras 24 horas, haciendo de alumnos, de hijos, de hermanos, de compañeros,... 

Si por lo que sea volvemos a "encerrarnos", pues nos encerramos, pero lo que no tiene ningún sentido es que salgamos al parque con los amigos y luego den clases desde casa, no tiene sentido que los fines de semana nos salgamos a comer fuera  y que las puertas de los coles estén cerradas. A los niños les tenemos que transmitir la alegría e ilusión de todos los años, aunque sepamos que no va a ser como siempre.

Por eso, y por mucho más, tengo ganas de que empiece el cole, con incertidumbres o sin ellas, con miedo o sin ello, pero que empiece y "eche a rodar" el curso, a pesar de las normas, de los protocolos y las restricciones.

Buen curso a todos... ¡y que duren mucho las clases!


martes, 1 de septiembre de 2020

Cerrando agosto

 Agosto siempre ha sido mi mes favorito. Días largos sin reloj, desayunos tardíos, dejarte llevar entre horas de piscina, playa, feria de pueblo y tertulias divertidas con familias y amigos alrededor de una buena mesa. Menudo mes de agosto tan diferente hemos tenido...el mes se me ha pasado en un parpadeo, me ha faltado una quincena...o más😊😩😏 aunque más aprovechado no ha podido estar.



Empecé el mes rodeada de verbos irregulares y libros de inglés..jejeje🇬🇧 Hasta el 8 que los guardé. Ese mismo día calentamos motores en la Primera Comunión de Pepe, uno de los mejores amigos de Álvaro. La verdad que nos supo a gloria y lo pasamos genial. Después de ésto, directos a Arjonilla, teníamos dos semanas para preparar la Primera Comunión de Álvaro, que ya os conté en el póster anterior que lo pensamos de repente y no nos parecía mala idea.



Dos semanas llenas de locura, de ideas, de “desidias”, de ilusiones, de miedos ( cada día los datos de covid eran peores),  de alegrías y de desvelos; pero ya os contaré detenidamente.




Acabamos agosto en kayak, con multiaventura, de playa a lo “omaita” con filetes empanados y disfrutando de los atardeceres sin prisa en la piscina.




Este agosto ha sido raro, tan raro como que nos levantan de los bares cuando más a gusto estamos y nos pensamos dos veces si salimos o no salímos,...incluso cuadramos los que somos porque no podemos pasarnos de 12 o incluso de 10 ahora. Un agosto sin procesiones, con feria pero sin ella, un agosto con nuevo complemento, las mascarillas😷,  que cada dos por tres se nos olvidan. Un agosto con reencuentros raros, sin besos ni abrazos.



Cada año, al finalizar agosto me pongo triste, o no sé si es triste o nostálgica. Me sucede como a finales de diciembre. En septiembre, como en enero, algo comienza. Y me da como morriña de los buenos momentos, pena de lo no aprovechado, pero con la esperanza que en ese nuevo comienzo tenemos cientos de oportunidades para crecer y ser felices.


A pesar de las distancias, de los cambios de planes, de los me quedo en casa en lugar de salir de cañas, de los recortes de horas y las noches con “toque de queda”,  ha sido un verano maravilloso, porque lo hemos vivido y lo hemos disfrutado. Después de todo, solo podemos dar gracias 🙏 , vivir el momento y no hacer planes de futuro, a saber cómo estaremos el mes que viene.


Y vuestro verano, cómo ha sido?